Con el verano a la vuelta de la esquina y el buen tiempo por fin acercándose, los españoles vuelven a las calles, playas y terrazas. Evitan el encierro más propio de invierno y buscan aprovechar al máximo las horas extra de luz, su ánimo mejora y también su predisposición a comprar.
Así lo demuestra el estudio IMRG Capgemini, quien ha asociado la anormal subida de temperatura en febrero de este año, con el incremento de las ventas de comercio electrónico (9.4%) en el Reino Unido. Un mes que experimento el mayor crecimiento del semestre.
Según los datos del estudio, las categorías de compra con mayor crecimiento en febrero fueron el sector jardinería con un 33,3% y el sector salud y belleza en un 13,4%.
Aunque el estudio se haya realizado en Reino Unido, sirve para comprender lo que ocurre en otros mercados con situaciones parecidas. En España no es un secreto que la estacionalidad juega un factor muy importante en la economía y aparte de las oleadas de turistas que vienen a pasar sus vacaciones, gran parte de este incremento económico se debe también al consumo interno.
El buen tiempo y el aumento de las horas de luz, hace que las personas quieran pasar más tiempo a pie de calle e incluso ir a pasear o tomar algo después de su jornada laboral, lo que genera un mejor estado de ánimo y los hace más susceptibles a mensajes comerciales en comparación con otras épocas del año.
Con el cambio de hora, es más probable que los consumidores paren en una o dos tiendas de camino a casa durante el horario de verano.
Según la revista Forbes, algunos productos tienen un carácter aspiracional para los consumidores, quienes los asocian directamente a las vacaciones, la vida social y las escapadas de verano. Productos como la ropa de playa, algunas bebidas espirituosas y productos de belleza, introducidos en las primeras subidas de temperatura tienen un impacto psicológico en los consumidores, quienes compran con la promesa de lo que les esperará y lo que disfrutarán.
La inestabilidad del tiempo en abril ha hecho que este sea el mes en el que más bañadores se vendan. Los cortos periodos de calor junto con las activaciones comerciales, implantaciones y promociones, lo convierten en el tiempo perfecto para vender productos aspiracionales.
¿Y tu marca ya está implementando esta estrategia?